El peso de Cataluña respecto del volumen total de exportaciones españolas (29.342,4 millones de euros) fue del 27,5%.

En el mes de abril, las exportaciones catalanas de mercancías aumentaron un 6,1% con respecto a la cifra del mismo mes del año anterior, alcanzando los 8.070,3 millones de euros. Esto supone un sostenido crecimiento con una tasa de variación anual superior a la del conjunto de exportaciones españolas (-6,3%). El peso de Cataluña respecto del volumen total de exportaciones españolas (29.342,4 millones de euros) fue del 27,5%. El sector químico, primera rúbrica industrial en términos de comercio exterior, sigue siendo el de mayor peso relativo de las exportaciones catalanas (30,2% de total), bienes de equipo (16,5% del total), sector automóvil (14,7%) y alimentación, bebidas y tabaco (13,7%).

Las importaciones catalanas en abril ascendieron a 8.799 millones de euros, con un descenso de -4,2% con respecto a la cifra del mismo mes del año anterior, 6,4 puntos porcentuales inferior al de las importaciones españolas, cuya tasa de variación fue del -10,6%. Cataluña representó el 26,1% del total de las importaciones españolas (33.717,8 millones de euros).

El saldo comercial de Cataluña registró en abril un déficit de -728,6 millones de euros, en contraposición del déficit registrado en el mismo mes de 2022 (-1.575 millones de euros con datos provisionales). La tasa de cobertura se situó en el 91,7% con una mejora del nivel de cobertura de 8,9 puntos porcentuales más que en abril de 2022 (82,9%, datos provisionales).

Por lo que se refiere a los datos acumulados en el período enero-abril de 2023, las exportaciones de Cataluña crecieron un 18,1% respecto del mismo período en 2022 hasta alcanzar 34.807,6 millones de euros (26,4% del total de las exportaciones españolas). Por su parte, las importaciones acumuladas de Cataluña supusieron 37.842,8 millones de euros (26,5% del total de España), con un aumento de 6,3% respecto del mismo período del año anterior, superior al de las importaciones de toda España (0,2%).

El análisis de estos datos exige ponerlos en el contexto de los problemas asociados a la persistente inflación de precios energéticos y de materias primas y de la discontinuidad en cadenas de suministro de ciertos bienes intermedios, además de la reconfiguración de flujos comerciales asociados al conflicto armado en Ucrania, al bloqueo comercial de Argelia a productos españoles desde mayo de 2022 y a la incipiente fragmentación del comercio global.